La Dermopigmentación no se limita a mejorar el aspecto estético
del rostro, sino que tiene otras muchas “aplicaciones paramédicas”.
Dentro de ellas las más importantes son:
Reconstrucción Total del pezón y de Areolas mamarias:
Se realizan principalmente cuando la areola y el pezón han desaparecido
a causa de una mastectomía debida a un cáncer de mama.
Cicatrices periareolares: Generalmente,
estas cicatrices están provocadas por cirugías estéticas de aumento
o reducción de volumen de los senos, que provocan un "cerco" blanco
alrededor e incluso, en ocasiones, cortan parte de la areola. Por
tanto, la solución será crear un camuflaje, mediante la micropigmentación,
para lograr un efecto óptico con el que ese "cerco" pase
desapercibido.
Alopecia, repoblación óptica capilar:
La repoblación capilar óptica mediante Micropigmentación, nos
permite camuflar aquellas zonas del cuero cabelludo donde existe
alguna cicatriz o alopecia incipiente. Normalmente se utiliza
después de implantes capilares, para dar un aspecto más relleno.
La pigmentación del cuero cabelludo o implante de pigmentos
es un tratamiento sumamente sofisticado que se basa en un procedimiento
muy especializado de tatuaje de folículos capilares y una técnica
de simulación artística de cabello.
Cicatrices: Es uno de los tratamientos más
complicados de realizar y con el que garantizamos resultados
satisfactorios al 100%. Aquí el problema no radica tanto en la
diferencia de tono entre la cicatriz y la piel, sino en la diferencia
de textura.
Está recomendado en los casos que existe una gran diferencia
de tono entre la cicatriz y la piel, como, por ejemplo, en cicatrices
oscuras sobre una piel clara o en el caso de una cicatriz clara
sobre una piel oscura. Está contraindicado este tratamiento en
queloides.
Pieles quemadas: Es un tratamiento muy recomendado
ya que ofrece resultados muy satisfactorios.
Vitíligos: Se trata de camuflar la zona igualando
el color de la parte despigmentada con el de la piel sana. No
implica que dicha parte quede curada.